Lo creas o no, tu minibar puede ser útil para limpiar las manchas de la alfombra. Si no tienes alcohol de limpieza en casa cualquier alcohol blanco te puede servir, desde el vodka a la ginebra, pasando por el tequila.

Su uso es muy sencillo y además, te permitirá quitar los malos olores que desprenda la alfombra. Puede quitar manchas difíciles y acabar incluso con las de color oscuro, como las de café, vino tinto y diversas salsas.

Su principal eficacia reside en la capacidad para cortar y descomponer la grasa, algo que los limpiadores que no están hechos a base de alcohol no pueden conseguir.

Si es posible, deberás secar la mancha cuando todavía esté fresca, ayudándote con un paño blanco, limpio y seco. Aplica el alcohol destilado a la mancha con suavidad, sin frotar, ya que de esta manera la mancha podría penetrar todavía más y causar un efecto adverso al que quieres conseguir. Deja que se empape la zona de alcohol durante unos minutos y que seque al sol.